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DESARROLLO DE "AMARTE ME BASTA"

La idea inicial es crear una historia que empezó con una relación, con otra historia de amor, y de la cual hay un libro empezado, y queremos continuarla, fabricarla para concluir su final con todo lo vivido en esta experiencia.

El proceso empezó con la grabación del disco, el inicio de la novela y el rodaje del videoclip que impulsa todo el desarrollo del proyecto.

Comenzamos entonces por el disco. Este es un pequeño popurrí de los temas del disco, aún sin mezclar:

El listado de las canciones que irán en le disco es el siguiente:

1. Amarte me basta

2. The strange beating of my heart

3. Ay, María

4. Santa Lucía

5. Hechizado

6. Dame

7. Solo por ti

8. Only for you

9. Vuelve

10. Deja que sea la noche

11. Cerca deti

12. Tu eres la culpable

13. Un cuento de amor

14. Bésame

El tema principal "Amarte me basta" y su versión en inglés "The strange beating of my heart" están terminadas, al igual que sus videoclips.

Este es el resultado:

        

El disco completo está casi acabado. Solo falta la mezcla y la masterización. Después, lanzamiento, mailing a radios y TV, pequeña gira promocional. Seguir la línea de crear  la historia junto a las personas que colaboren en este proyecto.

Lo siguiente, rodaje del nuevo videoclip de esta canción y siguiendo este storyboard:

Y finalmente desarrollo de la novela "Amarte me basta" con toda esta experiencia como contenido y final del libro.

He aquí un pequeño fragmento de la novela:

"El viento, la lluvia y los recuerdos lo llevaron hasta el lugar donde él y Alice se

besaron por última vez y su sorpresa fue mayúscula cuando al llegar la encontró allí,

sola, bajo la lluvia, con evidentes signos de estar también llorando. Alice se percató de

su presencia y le dijo con aire de dolor e incomprensión:

- ¿Qué haces aquí?

- No imaginaba que estarías en este sitio – respondió Robert.

Alice rió sarcásticamente para después mostrar un amargo llanto. En voz baja,

como evocando un lamento, añadió:

- Idiota, llevo veinte años viniendo casi a diario, a recordar, a soñar que

aquella tarde no faltaste a tu promesa.

Robert, llorando, se acercó a Alice, la cual prosiguió:

- ¿Lo recuerdas? “Siempre, siempre estaré a tu lado, protegiéndote y dándote

todo mi amor, pase lo que pase, te lo prometo”

De este modo Alice se acercó y empezó a golpear su pecho, golpes que poco a

poco fueron mermando para terminar en un intenso abrazo y un mar de llanto y dolor de

ambos.

- ¡Perdóname, perdóname Alice! – exclamó Robert amargamente sin parar.

Alice, sin dejar de llorar, repetía una y otra vez:

- ¿Por qué? ¿Por qué?

- Perdóname Alice, ojala pudiese cambiarlo todo, jamás pude dejar de amarte.

- Te esperé, te esperé y no volviste, ¿por qué?

- Perdóname mi amor, perdóname...

Ambos cerraron los ojos y se abrazaron con fuerza; veinte años no habían

podido apagar la llama de ese sentimiento. En ese momento los dos tuvieron claro que

nada podría jamás derribar los muros de su amor, ni el destino, ni la causalidad, ni el

infinito, ni las horas venideras; que aunque el tiempo hubiese pasado, para Alice, Robert

sería eternamente su luz, su estrella y su razón, y que ella para él sería siempre

su resplandor, su único y verdadero amor.

Los hados del tiempo parecieron desvanecerse de pronto, el Cosmos entero

pareció ir en sentido contrario, y toda la energía del Universo pareció concentrarse en

ese momento. Alice y Robert abrieron los ojos y allí estaban, abrazados bajo la lluvia,

ella con sus quince años como si nada hubiese pasado, como si todo hubiese sido un

sueño, una visión. Tal vez así fue, sólo una visión, pero lo cierto es que fue suficiente

para que Robert mirándola con un amor infinito le dijese:

- Alice, te amo y no voy a dejar que nada nos separe jamás.

Ella lo miró algo confusa y le preguntó:

- ¿Qué te pasa mi amor?

- Acabo de tener un deja vu; tú tenías treinta y cinco años.

- ¿¡Qué dices Robert!? ¿Cómo se te ocurre? Tengo quince años mi amor, sólo

quince años tonto.

- Y me alegro – expresó él.

- Entonces, ¿no te importa mi edad?

- No, claro que no. Me alegro de que tengas quince añitos.

Alice lo apretó muy fuerte contra ella, y besándolo con pasión, con locura y con

frenesí, añadió con un amor tan grande como nunca:

- Te amo Robert.

- Te amo Alice.

Aquella fugaz visión, un simple pensamiento, tal vez un augurio, bastó para que

ese amor se hiciese eterno, y si bien el camino no sería fácil, nada impediría que

estuviesen juntos, que se amasen en contra de todo y de todos.

Alice y Robert en ese momento lo tuvieron claro, su amor prevalecería..."

El objetivo final es haber creado una experiencia, una historia que pueda ser llevada a la pantalla.


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